La homeopatía

Últimamente muchos padres y madres de pacientes me preguntan sobre la efectividad de la homeopatía, espero que este pequeño resumen aclare dudas:

El término homeopatía en realidad agrupa 2 conceptos:

1.- Un método terapéutico: Aplicado por especialistas en homeopatía, aborda a los pacientes de forma más individualizada y selecciona los medicamentos en función de una historia clínica complementaria. Es un método más holístico que el de la medicina convencional, abordando tanto lo puramente biológico, como los aspectos emocionales y sociales y decidiendo el tipo de medicamento teniendo siempre en cuenta éstos aspectos.

2.- Un grupo de medicamentos: Que están descritos en los vademécum homeopáticos, que están contemplados en la Ley del Medicamento, y que pueden ser utilizados por cualquier médico. Aunque las materias primas son vegetales, minerales, animales o químicas, como en el resto de los medicamentos, se les suele considerar “productos naturales”, y no es una denominación correcta. Son medicamentos y se les aplica la misma legislación que al resto de los medicamentos, incluyendo la venta exclusiva en farmacias.

La homeopatía surge en el contexto universitario de la medicina modernista de la escuela de Viena (finales del siglo XVIII), con una publicación en la revista médica de referencia de la época, cuyo autor fue Samuel Hahnemann.
(Hahnemann, S. Ensayo sobre un nuevo principio para descubrir las virtudes curativas de las sustancias medicinales. Revista de farmacología Práctica y Cirugía, tomo II, parte 1ª. Ed Hufeland C W. Librería universitaria. 1796)

Hahnemann realiza un sistema a partir del uso de dos realidades que habían constatado otras publicaciones de la época:

1.- El uso de la relación entre los efectos tóxicos y terapéuticos de una sustancia (principio de la SIMILITUD), basado sobre todo en los estudios de Jenner sobre la viruela vacuna y el uso de ésta para prevenir la viruela humana (uso de lo SIMILAR para prevenir).

2.- La posibilidad de utilizar sustancias en bajas concentraciones (ALTAS DILUCIONES).

La similitud es un fenómeno que observamos en numerosos medicamentos que usamos actualmente, por ejemplo los antiarritmicos, que a bajas dosis mejoran las arritmias (alteraciones del ritmo del corazón) y a dosis mayores pueden provocarlas en corazones sanos.
Por otra parte los efectos biológicos de las altas diluciones se han probado en numerosos estudios de laboratorio y actualmente están avalados por premios Nobel como Luc Montagnier y Brian Josephson.
(Entrevista a Luc Montagnier, Science, vol 330, 24 dic 2010.
Brian Josepson, molecule memories, New Scientist letters, 1 November 1997)

En estos momentos ya podemos decir que existe homeopatía basada en la evidencia, que los estudios clínicos han demostrado su utilidad y sus escasos efectos secundarios, que en general dependen más de la deficiente actuación del terapeuta que la utiliza, más que del propio medicamento.

Por tanto, la homeopatía debería considerarse una opción más para tratar cualquier patología, incluso sería una opción preferible para el tratamiento de niños pequeños y lactantes por su excelente tolerancia y su falta de efectos secundarios, siempre que el paciente sea valorado por un médico homeópata experto, con amplia experiencia en el uso de medicamentos homeopáticos.

En Madrid, la pediatra homeópata que yo recomendaría es Mónica Delgado, ahí van sus datos:

  Dra Mónica Delgado, pediatra, neonatóloga, homeópata. Tel 915 217 229. C/ Juan de Mena 21, Madrid, Metro: Retiro, Bus: Puerta de Alcalá, desde Atocha: Bus 19.